AMENAZAS DE MUERTE Y ROBO DENTRO DE LA COMISARIA 6° DE EZPELETA

El día sábado 22 de abril, un hombre se dirigió a retirar el auto de su expareja de un lavadero en la zona de Quilmes. Su expareja identificada como Mercedes Malgarejo, policía bonaerense de la Comisaria 1° de Avellaneda, se encontraba en servicio y decidió dar una alerta por el hurto de su auto Fiat gris con los datos de quien se llevo el vehículo.

En la Av. Florencio Varela (Ezpeleta) encontraron al hombre abordo del auto en cuestión y lo detienen en un operativo cerrojo, en ese instante el detenido se entera de su acusación por el robo del auto. Débora Sánchez, Subcomisaria de la 1° de Avellaneda, pidió que lo trasladen a su comisaria, ubicada en Lavalle al 158 (Avellaneda), para dar declaración del hecho por ser vecino domiciliado en su jurisdicción.

Los agentes de Ezpeleta negaron su petitorio y por una cuestión de donde se produjo la detención el hombre fue llevado a la Comisaria 6.ª de Quilmes (calle Cuenca 5050 – Ezpeleta). Según un testigo de identidad reservada, afirmo a La Misión Informa que se encontraba en el lugar y vio como la oficial Malgarejo increpo a su exmarido apuntándolo con su arma gritando ‘te voy a matar, te voy a cagar a tiros’. En compañía de ella, estaba la Subcomisaria Sánchez que no intervino en la situación sino que arengo al acto de violencia, según describieron otros testigos.

La oficial en la mesa de entrada forcejeo contra Malgarejo, y luego de varios golpes entre sí, logro quitarte el arma reglamentaria de su poder. Mientras esto sucedía Sánchez se llevó el auto del frente de la comisaria quilmeña, sin ninguna orden judicial, hacia su dependencia policial en Avellaneda.

Personal policial de la comisaria 6.ª realizo una denuncia en asuntos internos por la pelea en el hall de entrada y el robo del auto en la puerta de la dependencia policial. Por otro lado, el hombre estuvo más de diez horas en situación de demorado y dijo que recibía las amenazas de muerte porque no accede a recomponer su relación amorosa con la oficial. Él mismo procedió a denunciar, por la falsa acusación, a su exmujer con grabaciones del lavadero y pruebas del petitorio de retirar el auto de ese comercio.

Hasta el momento no hay personas detenidas por este caso, mientras la UFI N°10 de Quilmes interviene la causa con colaboración de Asuntos Internos para esclarecer lo sucedido.