Pamela Martínez, una vendedora ambulante, denunció públicamente haber sido víctima de una violenta agresión policial hoy en el centro de Quilmes (Rivadavia y Av. Irigoyen), mientras vendía medias. Martínez afirma que fue “matada a palos” por la policía de Quilmes, resultando con lesiones graves. Su marido fue detenido en el mismo operativo. La mujer, quien ya había sido detenida y maltratada en febrero por el mismo motivo (e incluso sufrió una convulsión en la comisaría), ha expresado su desesperación y está pidiendo auxilio de los noticieros.
Actualmente, Martínez se encuentra en la puerta de la Comisaría Primera de Quilmes, donde asegura haber presentado la denuncia contra los policías. Denunció que, tras la agresión, fue amenazada con ser detenida nuevamente si ingresaba a la dependencia. La vendedora ambulante clama por la liberación de su esposo y pide la urgente intervención de los medios de comunicación y organismos de derechos humanos para investigar el abuso de autoridad y los apremios ilegales.
