LEGADO DEL PAPA FRANCISCO EN LA SANTIDAD DE ENRIQUE SHAW

El Papa Francisco jugó un papel clave en la promoción de la santidad del empresario Enrique Shaw, quien fuera Director de Cristalerías Rigolleau y Ciudadano Ilustre de Berazategui. Shaw fue conocido por su relación estrecha con sus trabajadores y su compromiso con la justicia social, lo que lo llevó a ser llamado “el empresario de Dios”.

El Papa Francisco aprobó el milagro atribuido a la intercesión de Shaw en 2015, lo que permitió su beatificación en la Catedral de San Isidro. La beatificación de Shaw es un reconocimiento a su vida de servicio y amor a los demás, y es un ejemplo de cómo la fe y la acción social pueden transformar la vida de las personas.

En Berazategui, Shaw es recordado por su gran humanidad y compromiso con la comunidad. Su legado es un ejemplo de cómo la Iglesia Católica puede reconocer y celebrar la santidad en personas que han dedicado sus vidas a servir a los demás.