En el día de ayer, la ciudad de Quilmes se despidió del fundador de la famosa pizzería “Los Blancos”, José Blanco, quien marcó una era en el corazón de las familias y amigos de la ciudad con su dedicación a la excelencia culinaria y el servicio al cliente.
Durante más de 50 años, Blanco y su familia se convirtieron en una institución gastronómica, ofreciendo no solo pizzas ricas y sabrosas, sino también un lugar agradable para reencontrarse y celebrar con los seres queridos.
La leyenda del “Maestro de la Pizza” permanecerá viva para siempre en el recuerdo de la ciudad de Quilmes, y su legado culinario vivirá a través de los clientes que mantuvieron la tradición de este reconocido lugar a través de las generaciones.