Un árbol de cristal, más conocido como Agathis alba sería derribado por una empresa constructora en una quinta de Berazategui. Allí, al fondo de una paradisíaca quinta de Berazategui, oculto entre el follaje, este árbol de cristal llama la atención de todos. Un grupo de vecinos, luchadores por el medioambiente, se toman la tarea de preservarlo de un desmonte injustificado.
Una comunidad ecologista del lugar reveló, no sin esfuerzo, que un inminente desmonte ilegal amenazaba a esta exótica especie. Una oportuna investigación y una creciente conciencia social desencadenaron un movimiento local que se unió para proteger al raro Árbol de Cristal.
Luego de las febriles jornadas de revisión de información y las firmas de protesta por el árbol, un grupo de ciclistas decidió hacer un gran esfuerzo y recorrer los 65 kilómetros hacia la quinta en Berazategui, unidos por la causa ecológica. En una jornada que unió la pasión por la ecología y el ciclismo, el grupo de ciclistas pasó por calles y caminos de La Plata hasta la dársena, ilustrando el largo camino que recorren los defensores del medio ambiente para lograr sus objetivos.
Por su parte, el Arbol de Cristal, una rara variedad originaria de Malasia, impresiona al espectador con su tronco cubierto de resina similares a “lágrimas“, que en las noches de luna llena reflejan el brillo de los cielos, dándole una apariencia etérea y mística. Y es que el Árbol de Cristal es algo más que una exótica presencia en una quinta. Es una apelación al sentido ecológico, un grito de justicia para la naturaleza y un simbolismo de resiliencia frente al maltrato humano.