El Gobierno eliminó los subsidios energéticos para 15.500 usuarios de countries, barrios cerrados y Puerto Madero que se hacían pasar por pobres para pagar menos la luz. Esta medida representa un ahorro de más de $3.000 millones y busca terminar con años de privilegios financiados por todos. El objetivo es garantizar una distribución más justa de los subsidios energéticos y focalizarlos en quienes realmente los necesitan.
La decisión se tomó luego de detectar declaraciones falsas de ingresos bajos en barrios exclusivos, como los de Hudson en Berazategui. El vocero presidencial afirmó que “la energía cuesta, y quien puede pagarla, debe hacerlo”. Esta medida busca promover la equidad y la transparencia en la asignación de subsidios energéticos, beneficiando a aquellos que realmente requieren apoyo económico para acceder a los servicios básicos.